David Villa, protagonista de excepción en 'El Partido de las 12', se mostró exultante después de una noche mágica para el barcelonismo y para recordar, también, en su historia personal: "hemos conseguido algo muy difícil, tanto por la ida como por el rival. Después de unos resultados adversos, algo así se disfruta, lo necesitábamos."Se llegó incluso, en su día, a hablar de una posible salida del club debido a que no era titular habitual, pero el asturiano nunca ha perdido la esperanza: "Siempre confié en mis posibilidades, si no, no habría hecho un partido como el de hoy." Ha sabido convivir con los buenos y los malos momentos: "No me puedo quejar porque he vivido momentos muy bonitos, pero hay otros más difíciles. Con trabajo diario consigues estas cosas. Yo siempre creo que voy a jugar, para eso trabajo durante la semana."Pese al 'subidón', no quiso pensar en una final, menos en si fuera contra el Real Madrid: "El objetivo es estar en la final, con quien sea, pero para eso queda muchísimo trabajo."También agradeció que la afición nunca le haya perdido el cariño, reconoció, ante la pregunta de Juanma Castaño (que conoce bien a su familia) que su padre le llamó para echarle la bronca por la que falló ante el sábado: "no le cogí el teléfono, ya le llamaría cuando estuviera más calmado."