No se repitió el milagro del domingo pasado en Las Ventas, y eso que hoy que saltaron al ruedo tres novillos con posibilidades, segundo, tercero y sexto, todos del hierro titular de Gabriel Rojas.Se notó la inexperiencia de los dos debutantes, Curro Damián y Carlos Galván, y, en cambio, destacó el oficio y las buenas formas del portugués Dias Gomes, aún sin llegar a redondear nada del otro mundo, con su primero.Curro Damián hacía su presentación en Madrid después de siete años de su debut con caballos, tiempo en el que, sin embargo, ha toreado más bien poco, por no decir prácticamente nada.Su primero se quedó debajo en los capotes, cortó en banderillas le costó un mundo embestir en la muleta fruto de su escasa raza, siempre con el freno de mano echado, soltando la cara y volviéndose; demasiadas adversidades para un novillero tan poco rodado, al que se le notaron las lagunas lógicas de la inseguridad y la falta de sitio, a pesar de la voluntad que puso, especialmente al natural.Con el sobrero que hizo cuarto se le vio más asentado a Damián, que extrajo pases de largo y lento trazo por el derecho dentro de un conjunto que, como al novillo, le faltó más chispa para que llegara a trascender. Pero el utrero se acabó en la segunda tanda y ya no hubo manera de remontar ni con toda la insistencia del mundo.Dias Gomes apuntó finura y elegancia en las formas frente a su primero, novillo con tanta clase como escaso brío, ligeramente condicionado por la falta de fuerzas y raza. Toreó el portugués con mucho gusto en muletazos largos y despaciosos sobre ambas manos.La pena, que el novillo se apagó pronto, lo que provocó que la faena no llegara a despegar lo suficiente, pero todo lo que hizo Dias Gomes tuvo consistencia por el mando, el temple y el sabor que demostró. Saludó una merecida ovación.El quinto fue novillo tardo, de incómodos y cortos viajes hasta que acabó parándose. Dias Gomes, que brindó al respetable, no pudo pasar aquí de tesonero ante la manifiesta dificultad de armar faena.El otro debutante en la tarde fue Carlos Galván, que se mostró excesivamente acelerado en los primeros compases de su labor al tercero. Sin embargo, se fue templando a medida que transcurría el trasteo, aunque la cota artística fue más bien baja. El animal tuvo nobleza y se movió, aunque yendo a menos por su menguada fortaleza.Cerró plaza el mejor novillo de la tarde, frente al cual se vio a un Galván más centrado, e incluso relajado, en su quehacer, mas fue un todo una exposición de ilusión y ganas para tratar de "tapar" su poco oficio. FICHA DEL FESTEJO Madrid, domingo 29 de junio de 2014. Menos de un quinto de plaza. Cinco novillos de Gabriel Rojas, bien presentados y de juego desigual. Destacó el sexto. Tuvo mucha clase pero poco fuelle, el segundo; noble, el tercero; bronco, el primero; tardo y sin clase; el quinto. El cuarto fue un sobrero de Hermanos Sánchez de León, noble y apagado. Curro Damián, silencio tras aviso y división al saludar tras aviso. Manuel Dias Gomes, ovación tras aviso y silencio. Carlos Galván, silencio y silencio.