Tras el terremoto de José Tomás, Granada volvió a la normalidad. Una normalidad que vino acompañada de un lleno en su plaza y que concluyó con la salida a hombros de los dos toreros triunfadores, algo que no ocurrió este jueves. Buena noticia para una empresa que, sin embargo, erró en elegir para estos dos festejos dos ganaderías a lidiar por día. Si este jueves fallaron Domingo Hernández y Victoriano del Río, este viernes pincharon Juan Pedro Domecq y Zalduendo. El único toro para el recuerdo, en noble y repetiror segundo, que posibilitó encauzar la puerta grande número 39 de El Fandi en su Granada. Y 'Primosoro' fue un notable animal que hizo honor a su nombre. Fácil y variado con capote y banderillas, El Fandi firmó una faena vistosa pero por debajo de las condiciones del toro. Ritmo, humillación y clase en unas embestidas que regaló el pupilo de Fernando Domecq. El Fandi, que recibió con una larga en el tercio y formó un alboroto con las banderillas, buscó el unipase, sin ligar. Lo mejor, la estocada en la suerte de recibir.Una oreja más sumó El Fandi ante el vacío quito de Juan Pedro. Lo recibió esta vez con verónicas rodilla en tierra, pero el jabonero se quedó sin correa tras un quite por lopecinas y el tercio de banderillas, llegando fundido a la muleta del granadino. Lo puso todo Fandila, exprimiendo al toro. La estocada, contundente.El otro triunfador de la tarde fue José María Manzanares, que lidió en primer lugar un animal muy lavadito de cara con el hierro de Juan Pedro. Manzanares más estético que profundo, realizó una faena ligerita pero ligada. El toro, sin clase ni fuerza, al menos permitió al alicantino mostrar su toreo elegante. Y como colofón, un volapié de libro. Perfecto de ejecución y colocación que ayudó a la concesión de la oreja.La gran faena de Manzanares llegó con el sexto. Un animal de Zalduendo que se movió sin clase ni ritmo, pero que sí tuvo cierto recorrido por el pitón derecho. Por ahí basó su faena el alicantino, que tiró de temple y su habitual empaque para poner en pie al coso granadino. Acertó siempre en dejar en la cara del toro para ligar varios redondos que por trazo se convertían en circulares. La estocada fue recibiendo y cayó en buen sitio, pero Luis Blázquez levantó al toro al apuntillarlo y la espera para que el animal cayerse se hizo eterna. Aún así, no se enfriaron los tendidos que pidieron y consiguieron el doble trofeo para Manzanares.Decido salió Morante con el escaso primero de Juan Pedro. Soltó con buen aire el capote para cuajar verónicas de buen trazo. Pero pronto demostró el toro que su medida casta y fuerza sería un lastre para la faena del torero sevillano. Morante dejó apunte de su toreo. Un inicio por alto, varios redondos empacados... Pero las tandas tenían que ser de tres y el de pecho. Escaso bagaje.Sin clase ni ritmo embistió el cuarto de Zalduendo, altón y de escaso trapío. Faena voluntariosa y trabajada de Morante al que se le vio afanoso pero con escasa brillantez. FICHA DEL FESTEJO Granada, viernes 20 de junio de 2014. 2ª de Feria. Lleno aparente. Tres toros de Juan Pedro Domecq (1º, 3º y 5º) y tres de Zalduendo (2º, 4º y 6º), terciados, pobres de cara y desrazados en conjunto. Destacó el noble y repetirdor 2º y el manejable 6º. Morante de la Puebla, ovación y silencio. El Fandi, dos orejas y oreja. José María Manzanares, oreja y dos orejas tras aviso.