Los secretarios generales del Sindicato Unificado de Policía (SUP), José Manuel Sánchez Fornet, y de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), Alberto Moya, han presentado en rueda de prensa lo que han llamado un modelo de seguridad para el siglo XXI, una vez constatado que el actual ha quedado obsoleto y no se adapta a la situación económica que atraviesa España.Con su propuesta se ahorrarían entre 3.000 y 4.000 millones de euros al año, lo que supone "el gasto de la paga extra que no cobran los funcionarios o la mitad de los recortes en sanidad", según ha explicado Moya.En un sistema en el que proliferan diferentes cuerpos policiales en el territorio español, que, entre otras cosas, ha dado lugar al solapamiento de competencias, el SUP y la AUG han constatado que el "auténtico talón de Aquiles" del modelo es la falta de coordinación.Y para acabar con esa situación, las dos organizaciones abogan por un pacto de Estado que concluya en un modelo más austero y eficaz, y que también prevea un salario "digno" para esa Policía Civil del Estado, que no sea inferior a los de las policías autonómicas y locales.Según la propuesta, el modelo quedaría conformado por un Cuerpo de Policía Civil del Estado, dependiente del Gobierno central, el único con competencias en todo el territorios y que asumiría prácticamente todas las funciones que la ley otorga ahora a la Policía Nacional y a la Guardia Civil.Se mantendrían la Ertzaintza, los Mossos d'Esquadra y la Policía Foral de Navarra con sus competencias actuales, pero con el deber de entregar a la Policía Civil del Estado los asuntos y materias que ésta les solicite.Las policías locales harían labores de proximidad, se armonizaría su desarrollo en todo el Estado y se propiciaría la formación de cuerpos supramunicipales para comarcas o mancomunidades.SUP y AUGC creen que el Servicio de Vigilancia Aduanera, ahora dependiente de Hacienda, debería integrarse en la Policía estatal y que la vigilancia exterior de las cárceles la ejerciera Instituciones Penitenciarias, con un cuerpo específico.En materia de formación, proponen que se unifiquen los requisitos de ingreso y parte del temario con una formación básica idéntica para todos los cuerpos, mientras que abogan por una base de datos centralizada competencia de la Policía Civil del Estado alimentada por todos los cuerpos.Según los datos facilitados por esas organizaciones, en España la ratio es de 4,86 agentes por cada mil habitantes, muy por encima de los 3,27 de la media europea y la más alta de la UE y el doble de la de Estados Unidos.Conseguir acercarse a la media europea supondría eliminar 73.339, lo que supone que sobraría casi al completo uno de los dos cuerpos estatales actuales.El secretario general del SUP, José Manuel Sánchez Fornet, ha explicado que "no se trata en ningún caso de echarlos, sino de racionalizar" sus labores, de manera que el trabajo sea más eficaz.Ambas organizaciones han observado que, a pesar de este elevado número de agentes (unos 224.000), en el día a día hacen falta más efectivos porque cada cuerpo "ignora la existencia del otro".Se añade a esto una falta de coordinación y, así, el documento afirma que "las 'guerras de policías' son algo más que sucesos aislados" y que las funciones de cada cuerpo están "totalmente descolocadas".Durante la presentación, Fornet ha incidido en que actualmente hay "dos cuerpos totalmente enfrentados en lo que se refiere a los mandos, que si pueden hacer prevalecer su trabajo, bien, pero si no, ponen la zancadilla al otro".Ha puesto como ejemplo de esta "grave descoordinación" los atentados del 11-M, cuando los Tedax de la Guardia Civil "no pudieron actuar", lo que en su opinión hace que España "no sea un país seguro y las fuerzas y cuerpos de seguridad no sean eficaces".El SUP y la AUGC han presentado este nuevo modelo de policía al PP y al PSOE, que según han reconocido "no lo han recibido muy bien", al igual que UPyD, mientras que IU sí está a favor.No lo han presentado oficialmente al Ministerio del Interior, aunque sí "extraoficialmente", recibiendo una respuesta negativa.El resto de sindicatos y organizaciones policiales tampoco están a favor, según ha dicho Fornet, "no porque lo hayan analizado, sino porque su línea es "decir lo contrario a lo diga el SUP".