Cuenta el dicho popular que los autónomos nunca se ponen enfermos,  que tienen otra sangre... pero los datos cantan y se demuestra la falacia de esas frases. Aunque en los últimos años ha mejorado mucho lo que se llama “índice de vida saludable” algunos parámetros perjudiciales se disparan.

Como el estrés, que afecta a 7 de cada 10 y llega hasta el 90% en las mujeres autónomas de entre 35 y 44 años. También el alto porcentaje de obesidad o sobrepeso que supera el 70%, muy por encima de la media. Lo explicaba el doctor Ángel Garijo:” Es muy preocupante porque a partir de los 35 años a medida que envejecen va aumentando el sobrepeso y la obesidad hasta llegar a un 80% en los hombres”. 

Y su dieta no ayuda. El 66 % toma excesivas carnes rojas y embutidos, aunque con la edad aumenta el consumo de frutas y verduras, especialmente en las mujeres. Ellas comen más fruta, un 61% dice que consume 2 o más piezas al dÍa y también más verdura,  el 47% toma 2 o más raciones  frente a ellos que se quedan en un 22%. Lo mejor..., que sólo 2 de cada 10 reconoce ser fumador, la misma proporción que quienes aseguran que duermen muy bien, a pesar del estrés. Tienen la conciencia tranquila o están rendidos.