El defensa del Real Madrid Sergio Ramos habló de la diáspora de futbolistas internacionales que dejarán en cuadro la próxima semana a su equipo, y aseguró que espera "que todo el mundo vuelva sano" y "no haya ninguna sorpresa" ahora que se afronta la fase decisiva de la temporada. "Tenemos ahora un periodo de partidos internacionales y esperemos que en diez días todo el mundo vuelva sano y no arrastre ninguna lesión ni molestia. Esperemos que no haya ninguna sorpresa", dijo a los medios del club. Ramos, asimismo, analizó el último triunfo del Real Madrid por 5-2 ante el Real Mallorca en el estadio Santiago Bernabéu: "Fue un partido un poco espeso, sobre todo en la primera parte, en la que nos faltó un poco más de concentración y de actitud. En la segunda tuvimos más ritmo, intensidad y supimos crear ocasiones y darle la vuelta al marcador. Lo bueno de jugar en casa es que la afición transmite la tranquilidad de que el equipo tarde o temprano puede ganar los partidos. Nosotros lo notamos sobre el césped", señaló. El capitán madridista admitió errores a balón parado y prometió trabajo para seguir mejorando: "Hemos sufrido a balón parado y habrá que seguir mentalizados en mejorar porque tenemos una temporada aún muy larga por delante. Ojalá en los próximos partidos encajemos menos goles y suframos menos".