La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, ha defendido su equipo en el Ayuntamiento diciendo que son "los compañeros perfectos de equipo para hacer una política diferente", y ha admitido que "ha aprendido la lección" y que se equivocó cuando decía que no debe haber imputados en una lista o en un Gobierno, porque ahora sabe que "hay que precisar mucho qué tipo de imputaciones son". "Debí ser más prudente", ha reconocido.Durante una entrevista en la Cadena SER, Carmena ha dicho que algunos miembros de su candidatura "quizás hayan tenido un pasado por el que ahora quiera pedir perdón", pero "para que una persona trabaje en lo público tiene que tener corazón y mis compañeros de candidatura y mis 19 concejales lo tienen".Por otro lado, Manuela Carmena se reune este viernes con los presidentes del Banco Santander, Ana Patricia Botín, y del BBVA, Francisco González, con los que analizará, entre otras cuestiones, qué medidas se pueden poner en marcha para que estas entidades ayuden al Ayuntamiento a resolver los desahucios.La alcaldesa de Madrid ha recalcado su preocupación por evitar que la gente se quede en la calle, para lo cual cree que hay que entablar un contacto "muy estrecho" con los bancos, que son los que ponen en marcha las operaciones de lanzamiento.Carmena ha señalado que ya se ha reunido con los directivos de Bankia, quienes plantearon la posibilidad de ceder al Ayuntamiento algunas de las viviendas vacías que tienen para que las oferte como alquiler social."Falta mucho por avanzar", ha admitido Carmena, aunque ha incidido en que vio "voluntad" por parte de Bankia para solucionar el problema y no de forma teórica, sino con una propuesta concreta.Hoy hará el mismo planteamiento a los presidentes del Santander y de BBVA, a los que espera convencer de que "tienen una responsabilidad contraída con la ciudadanía" después de las ayudas que han recibido del Estado en los últimos años.Y la forma de devolver esa ayuda, ha continuado, es ayudando a su vez a los ayuntamientos a resolver el problema de los desahucios.Respecto a las viviendas públicas que el Ayuntamiento vendió a "fondos buitre", Carmena ha remarcado que son operaciones cerradas, pero existe la posibilidad de que un juez las revoque si hay razones objetivas para ello.La alcaldesa ha dicho que se va a estudiar la posibilidad de resolver esos contratos, bien por acuerdos con los compradores o bien judicialmente "si los jueces lo estiman".Bajo su punto de vista, la vivienda "no es un producto financiero, no puede serlo", y en esta línea ha defendido que, antes de seguir aumentando la construcción de viviendas en la capital, tal vez hay que estudiar qué hacer con las que hay vacías y si se deben rehabilitar muchas de las antiguas.También ha aclarado que cuando dice que hay que acabar con los desahucios no quiere decir que un propietario no pueda recuperar su vivienda si la persona que la está alquilando no paga, ya que la voluntad del Ayuntamiento es dar una alternativa habitacional a esa persona en el plazo de un mes, de manera que el propietario recupere su piso y el inquilino no se quede en la calle.