En la pésima gestión que ha llevado a cabo desde su nombramiento, él y su equipo de gobierno, han utilizado su posición para llevar a cabo una cruzada personal contra el proyecto minero y contra todas las personas que apoyamos el mismo. Durante su etapa como regidor, únicamente se ha dado voz, ayuda y respaldo a las personas que al igual que él, son contrarias al proyecto minero (y luego habla de los intereses personales y el clientelismo de la oposición), demostrando así, la poca o nula responsabilidad en el cumplimiento de su deber como máximo representante de los ciudadanos tapiegos, (entre los que nos sentimos incluidos) aunque nunca se haya tomado la molestia de escuchar personalmente nuestras reivindicaciones. Ha demostrado repetidamente, que no velaba por los intereses generales de todos los vecinos, si no por los intereses de unos pocos. Los vecinos de Tapia estamos ya muy cansados de oírle hablar de “la herencia recibida”. Estamos cansados de oírle hablar del Polígono Industrial como única propuesta para salir de la crisis en Tapia, cuando de todos es sabido, que el Polígono Industrial es privado y para cualquier empresa en estos momentos de crisis, es económicamente inviable instalarse en el mismo. Consideramos que su dimisión ha sido lo mejor para el pueblo. Queremos un alcalde que vele por los intereses de todos los ciudadanos, sin menospreciar a ningún colectivo. Un alcalde que tenga en consideración cualquier alternativa empresarial que sea potencialmente generadora de empleo. Un alcalde de todos, para todos y abierto a nuevas ideas e iniciativas que nos ayuden a salir de esta maldita crisis. El pueblo es muy sabio y no olvida, en las próximas elecciones lo demostrará.