Fernando Alberca, especialista en educación, ha explicado en La Mañana que “los hijos si cuentan cosas, pero cuentan dependiendo del riesgo que corran”.Alberca ha comentado que lo que hace falta para conseguir que los hijos se abran es “lo que hace falta es estar muy callado, para un hijo hable los padres tienen que estar en silencio y no correr riesgos como poner caras extrañas”.“Para que hable de algo importante hay que hablar mucho de las cosas no importantes, de todo, y no cortarle. Hay que reír con él, llorar con él y es cunado él se abre porque está deseando hablar”.Fernando Alberca recomienda que hablemos con “ellos como si tuvieran dos años más, es una forma de hacerles madurar, y sonreír más. Hay un estudio que dice que el 80 por ciento de los padres de hijos delincuentes no sonreían nunca”. ¿Y ellos, nos escuchan? Según Fernando Alberca, “más de lo que nos podíamos imaginar. Se fían de nosotros mucho más que de nadie. Lo único que tenemos que enseñarles con nuestra vida son las grandes lecciones, solo con nuestra vida no con los discursos. Y en los discursos que ellos crean que están hablando de igual a igual e incluso que quede un poco por encima. Sabe que tenemos el consejo bueno, pero tiene que resistirse”."Para que un hijo hable los padres deben estar muy callados"