Un agente de la guardia civil adscrito a una de las unidades especiales de la Jefatura de Montaña de Jaca ha muerto mientras realizaba salto base en el valle de Gistaín, en el Pirineo oscense, según ha informado el Instituto Armado.

El accidente se produjo en un punto sin determinar cercano al municipio de Saravillo, mientras el agente disfrutaba de un día libre junto a unos amigos practicando salto base. Un deporte de riesgo que consiste en saltar desde una roca al vacío con un traje especial que permite el planeo. Los compañeros habían realizado el salto antes y esperaron a que el guardia civil llegara al punto convenido previamente. Al ver que no llegaba, se iniciaron las labores de búsqueda para intentar contactar con él, y después para encontrarle por la zona. La búsqueda se tuvo que suspender al llegar la noche. Su cuerpo fue avistado en la mañana de hoy por un helicóptero de la Guardia Civil y posteriormente recuperado por miembros del equipo de rescate. Aún se desconoce qué falló y por qué se produjo la trágica muerte del agente.

El fallecido tenía 49 años y había nacido en Salamanca. Pertenecía a una unidad de alta especialización en rescates y había tomado parte en misiones internacionales, por ejemplo, en el salvamento de dos espeleólogos que se quedaron que se quedaron atrapados en una montaña en Marruecos en el año 2015.