El Boletín Oficial de La Rioja publica hoy la Orden por la que se establecen y convocan las líneas de ayuda para paliar los daños causados en infraestructuras y explotaciones agrarias tras las crecidas del río Ebro y sus afluentes en febrero, marzo y abril. Desde hoy, los afectados disponen de un mes para presentar las solicitudes. La Orden establece una serie de requisitos para ser beneficiarios de las ayudas. En primer lugar, estar inscritos en el Registro de Explotaciones Agrarias y, si no lo está, hacerlo a través de la Solicitud Única antes del 15 de junio; adquirir el compromiso de suscribir un seguro durante los dos años siguientes a la percepción de la ayuda; y presentar una declaración de daños. Las cuatro líneas de ayudas que contempla la Orden son para explotaciones que hayan tenido daños por inundación en sus infraestructuras o bienes de producción; para titulares de explotaciones con daños en sus producciones y que tuvieran seguro; para financiar intereses de préstamos; y para que los ayuntamientos reparen caminos y otras infraestructuras. Al margen de las ayudas, el consejero ha explicado que durante estos meses se han coordinado también una serie de actuaciones directas para restituir la situación provocada por las crecidas del Ebro y sus afluentes en los diferentes términos municipales afectados, a través de Tragsa. Así, comunidades de regantes de 12 municipios han informado sobre la necesidad de realizar obras de reparación que ya se han iniciado por un importe de 700.000 euros. También la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) y Tragsa están trabajando en 48 puntos afectados en el río Ebro dentro de Dominio Público Hidráulico (motas de defensa). Se estima que se alcanzará el centenar sumando las actuaciones en los afluentes, en especial Alhama, Cidacos y Linares, con un coste de 4 millones de euros.