Los trabajos están siendo ejecutados por una empresa local. La prioridad de esta actuación es evitar tropiezos y caídas de las personas que transitan por esta vía, sobre todo los días de mayor afluencia de gente como los miércoles. Cabe recordar que, precisamente los miércoles es cuando esta avenida de la población acoge el mercado semanal, siendo el escenario de múltiples paradas temporales que exponen su género para atraer las ventas. Del mismo modo se prevé rebajar las aceras en determinados puntos, a modo de rampas para garantizar la accesibilidad de los carritos, o las sillas de ruedas. También se contempla la incorporación de un paso de cebra a la altura de la calle San Agustín, con el objetivo de favorecer el tránsito peatonal en las horas de entrada y salida del colegio Grangel Mascarós. De esta manera, el nuevo paso de peatones daría continuidad al que ya existe en la calle Juan Sales. La duración estimada de esta actuación es de aproximadamente un mes, y el presupuesto total asciende a 21.760 euros. Vicente Mateo, concejal de urbanismo: “Se trata de una actuación muy demandada por los vecinos, ya que ambas aceras han sufrido un deterioro más que evidente, debido al crecimiento de las raíces de los árboles. Esperamos que una vez la obra esté concluida, la avenida recupere la accesibilidad que requiere una avenida tan transitada por los peatones como es la del Teniente General Federico Michavila”.