Los ladrones de joyerías conseguían fundir literalmente con la lanza térmica las cámaras acorazadas alcanzando en pocos segundos temperaturas de 3000 grados. Los agentes averiguaron que el hermano del líder de la organización trabajaba en el taller de Alcalá de Henares al que el grupo accedió vulnerando los sistemas de seguridad que estaban desactivados.Se les acusa de 5 robos de estas características. Con este, son 3 los golpes policiales a bandas de butroneros en menos de 15 días.En otra operación denominada "Moraleja Madrid", la Guardia Civil ha desarticulado una banda dedicada a realizar robos con fuerza por el procedimiento del butrón, en bancos y gasolineras.Hay 6 detenidos de origen albano-kosovar de entre 18 y 45 años. Tres de ellos tienen orden de expulsión de España por Delegación del Gobierno. El grupo se dividía en dos células, coordinadas entre sí, pero que nunca actuaban juntas.Los objetivos eran siempre locales aislados y con poco trasiego de personas. Días antes de perpetrar el robo, los líderes de cada grupo se desplazaban al lugar elegido para estudiar la zona, esconder las herramientas y determinar las medidas de seguridad para evitar ser detenidos.Durante el robo, rompían los cajetines de alarma y tras alejarse un tiempo prudencial para ver si acudía alguna persona, volvían al local para realizar el butrón. Luego, huían en dos coches.Con la desarticulación de esta banda, se han logrado esclarecer 7 robos en dos gasolineras y cinco bancos de Madrid, Toledo y Guadalajara.