Estar conectado con el móvil constantemente o estar pendiente del ordenador y todos este tipo de acciones que nos hacen estar pendientes del trabajo repercuten negativamente en nuestro cerebro, porque ayudan a magnificar el estrés y desgastan la energía cerebral.Según nuestro experto, esto puede repercutir gravemente, sobre todo en temas de memoria, desordenando nuestra actividad. Lo normal es, cada dos horas, tratar de hacer un parón cada dos horas, para revitalizar nuestro cerebro. Y la situación ideal, en todo caso, es no seguir pensando en trabajo cuando acaba nuestra jornada laboral.Las personas que tienen un trabajo nocturno también ven alterado su cerebro. Según Álvaro Bilbao, robar horas al sueño es malo también para nuestra memoria.Si no desconectas de tu trabajo, tu cerebro lo paga