"Esperábamos que la exposición tuviera éxito, pero no que fuera tan rotundo", ha confesado la comisaria, que se ha mostrado muy satisfecha de cómo se ha desarrollado esta "aventura increíble", en la que la colaboración "estrecha" entre museos ha sido fundamental para reunir las doscientas obras de "Dalí. Todas las sugestiones poéticas y todas las posibilidades plásticas".Aunque hasta el martes no se conocerán las cifras concretas, la exposición, que cerrará sus puertas a las once de esta noche, ha superado en Madrid las 700.000 visitas, batiendo todos los récords de las organizadas en la capital.Unas cifras similares a las que la muestra alcanzó en el Centro Pompidou de París, donde, con 790.090 visitas, también se convirtió en la más concurrida de la historia del museo, solo por detrás de la que la misma pinacoteca dedicó también a Dalí en vida del artista, en 1979. En Madrid se ha tratado de una ocasión única, pues el Reina Sofía ha ofrecido las obras emblemáticas de uno de los mayores genios creativos del siglo XX, recabadas del propio museo pero también procedentes de otras pinacotecas, y, consciente de ello, el público ha aprovechado hasta las últimas horas para no perdérsela. Las colas en el Reina Sofía han sido una de las imágenes de este verano en la capital, una constante que hizo que el museo decidiera la prolongación de sus horarios hasta las once de la noche. Pero no solo se ha tratado de la cantidad de público que ha abarrotado desde el 27 de abril las salas del museo sino el hecho de que las personas que han acudido han pasado mucho tiempo frente a las obras de Dalí y han comentando entre ellos sus impresiones, ha señalado Montse Aguer, directora de la Fundación Gala-Dalí.Todo tipo de público ha acudido en estos meses a la exposición: nacionales y extranjeros, mayores, jóvenes y niños, ya que Dalí "atrae" a todos por igual, ha advertido la comisaria, que ha indicado que parte de la causa del acercamiento de los jóvenes a la obra de este artista es su capacidad de "provocación"."Se ve muy actual. Es un creador del siglo pasado, pero con una gran capacidad de anticipación", ha precisado Aguer.Aunque las obras más emblemáticas como "Meditación sobre el arpa", de 1933, la famosa "Figura en una ventana" o la cubista "Pierrot tocando la guitarra", ambas de 1925, han concentrado continuamente a un gran número de espectadores, el público se ha interesado por igual en toda la exposición, que ha hecho un recorrido cronológico por la producción de Dalí. Así, ha dicho Aguer, además de los autorretratos, han despertado mucho interés las últimas obras del artista, su acercamiento a la ciencia y el regreso a los clásicos. También ha sido una ocasión para contemplar las 30 piezas que no se habían visto nunca en España, como "Las bañistas", cedida por el Museo Dalí de Saint Petersburg (Florida, EE.UU.); "La persistencia de la memoria", del MoMA de Nueva York, o "Alucinación: seis imágenes de Lenin sobre un piano", del Centro Pompidou de París. El público, ha explicado la comisaria, ha asistido también divertido al montaje de los sorprendentes vídeos que se han proyectado a diario y en los que se resucitaba al mejor Dalí. Unos montajes que han tenido el pasado fin de semana su culminación con el ciclo audiovisual "Delirio final", un recorrido conjunto por la producción en cine, vídeo y televisión del artista. En definitiva, un "proyecto feliz" para la comisaria, que se ha mostrado convencida de que se tardará mucho tiempo en repetirse una muestra como ésta sobre Dalí.