Según un estudio de la Universidad del País Vasco, "algunos aspectos físicos de la madre no los heredamos por la genética, sino por el comportamiento, como la grasa corporal o la morfología. La cultura de la madre determina nuestro aspecto físico”, explica el experto en ciencia de La Mañana, Jorge Alcalde.

“La influencia de una madre en un hijo va desde el primer momento de la concepción, incluso antes. Algunos aspectos químicos de la mujer, que aun no ha concebido, pueden influir en el futuro desarrollo del feto.  Una investigación realizada en Londres, ha desmostado que mujeres maltratadas mientras estaban embarazadas, con problemas de nutrición o con estrés, concebían niños que de adultos tenían mas probabilidad de padecer determinados tipos de enfermedades como osteoporosis, diabetes o problemas cardiovasculares”.

“Hay científicos que dicen que hay una especie de matrix intrauterina desde el minuto uno de la concepción y que la influencia es decisiva para la salud física y mental del niño que va a nacer”.

"El contacto en los primeros minutos después de nacer es fundamental para el desarrollo posterior de mente y salud de los niños. Incluso el contacto emocional previo al nacimiento. En ratones se ha demostrado que generando cambios en los comportamientos de las hembras, se pude cambiar el color del pelaje de las crías”.

A una madre la llevamosdentro toda la vida. "La madre cede células la hijo pero también a la inversa, hay células del niño que se integran en la madre, incluso la pueden curar algunas enfermedades”.

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