El decreto establece dos fases. La primera es la de autorización de la instalación y fija un plazo máximo de dos años para construir, equipar, contratar el personal y conseguir la acreditación de la Entidad Nacional de Acreditación. La segunda es la fase de autorización de funcionamiento. El director de Innovación, Industria y Comercio, Julio Herreros, ha destacado que “con las estaciones ITV existentes (Calahorra, Santo Domingo y dos en Logroño), y una vez las nuevas estaciones autorizadas se encuentren en servicio, la red de estaciones de La Rioja se encontraría completa y podría asumir el aumento del parque de vehículos que se pudiera producir en los próximos 20 años, como mínimo”. En cuanto al balance del año pasado, fueron inspeccionados 172.087 vehículos, de los que el 86,35% pasó con éxito su revisión. De ellos, el 97,63% fue inspeccionado con motivo de las inspecciones periódicas obligatorias en función de la antigüedad. Los principales defectos leves detectados se debían a causas relacionadas con el alumbrado y señalización, el motor y transmisión, y la carrocería y chasis. En cuanto a los defectos graves, el mayor porcentaje corresponde al grupo de ejes, ruedas, neumáticos y suspensión. Del total de los vehículos inspeccionados, el 78,56% corresponden a titulares domiciliados en La Rioja, mientras que el 21,44% restante pertenecen a titulares domiciliados fuera de la región. Por estaciones, el 17% de las inspecciones realizadas en Santo Domingo de la Calzada correspondieron a vehículos procedentes de Burgos y un 14,33% del País Vasco. Asimismo, el 17,14% del total de inspecciones realizadas por la Estación de Calahorra eran de vehículos procedentes de Navarra. En cuanto a las estaciones sitas en Logroño, el 6,78% de los vehículos procedían de Navarra y el 6,36% de Álava.