Tras dos años de descensos, han vuelto a aumentar en Málaga los procesos de ejecución hipotecaria. Se trata de un procedimiento judicial que se inicia cuando el cliente no paga las cuotas de su hipoteca a la entidad bancaria, es un trámite previo al desahucio. En los nueve primeros meses del año, se han registrado en la provincia un total de 2.995 ejecuciones hipotecarias, según los datos que acaba de publicar el Consejo General del Poder Judicial. Es un cuatro por ciento más que en el mismo período de 2012 y un trece por ciento más que hace dos años. Desde el inicio de la crisis se han registrado más de 22.200 procedimientos de este tipo en los Juzgados de Primera Instancia e Instrucción de Málaga. Supone que cada día desde el año 2008 se tramitan en Málaga diez ejecuciones hipotecarias. En todo 2007 los tribunales malagueños apenas recibieron un millar de asuntos de este tipo: entre enero y septiembre de este año ya se ha triplicado esa cifra. Una vez la entidad financiera inicia el proceso de ejecución y se lo comunica al cliente, el afectado tiene un plazo mínimo de cinco días para alegar.