"Huvo diferentes predicciones experimentales en Francia sobre el tiempo que haría en verano en España. Se difundió solo una de esas predicciones. Y eso es un error porque el verano son tres meses y no se puede predecir el tiempo de tres meses con cierta predicción", ha señalado Manuel Toharia, divulgador científico español, que ha presentado en La MañanaEl libro del Tiempo.

La información del tiempo ha sido siempre un tema que ha importado y sobre todo ha influido en el comportamiento de la naturaleza y, concretamente, de las personas. Según este meteorólogo es sencillo equivocarse. "El cambio climático es un sintoma más de la enorme injusticia que hay en el mundo actual"; y ha añadido que "el mundo está muy mal distribuido. Hay un exceso de  población, y la mayor parte de los recursos naturales los consumimos tan sólo un 20 por ciento -los países desarrollados- y, además, de manera ineficiente; dejando a la inmensa mayoría sin ellos. Esto introduce una cantidad de desequilibros en la naturaleza".

Durante siglos han existido instrumentos o formas para predecir el tiempo, como la magia, los astros, las religiones o las cabañuelas, tradiciones que "a día de hoy no tienen peso, aunque permanezcan en lugares rurales", ha dicho.

Sin embargo, otra forma válida de comprobar el tiempo a corto plazo es prestar atención en la actitud que adoptan algunos animales horas antes de "caer un chaparrón", por ejemplo. Hay gente que incluso utiliza los hormigueros para predecirlo. ¿Cómo? Las hormigas que entraban y salían en fila de su hormiguero, se introducen en él horas antes de una tormenta para refugiarse.

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