La séptima versión dada por Miguel Carcaño de lo sucedido la noche en la que Marta del Castillo fue asesinada, no es más que un intento por su parte de conseguir una “revisión de condena”. “Miguel no piensa que tenga todo perdido, y cree echando toda la culpa a su hermano no estará 20 años en la cárcel”.

“Miguel está intentado escurrir”, afirma Malena Guerra,  autora de “Red de mentiras”. "El hermano sí que estaba y pudo participar en la agresión, pero no hasta el punto de afirmar que es el homicida. Miguel está en una encrucijada porque sabe que si se encuentra el cuerpo el marrón se lo va a comer él solito. Está buscando tensar al hermano para que cuente o diga donde está el cuerpo, algo ilusorio y que nunca va a ocurrir”.  “En el libro le damos mucho protagonismo a Francisco Javier. Tenía mucho mas que ver de lo que había dicho”.
De hecho, que su hermano,  Francisco Javier Delgado “se fuera de rositas, a la policía de dejo muy mal sabor de boca porque sabían que había estado allí. Lo probaban los teléfonos. Sabían que su exmujer le estaba dando coartada, pero no se ha podido probar”.

En cualquier caso, asegura, "la declaración de Carcaño hace aguas en muchos puntos".

Francisco Javier Delgado,  ha quedado en libertad tras declarar este martes como imputado ante el juez que instruye el caso. En la declaración de Delgado, que se produce después de que Carcaño, en su séptima versión de los hechos, le acusara de matar a Marta con la culata de una pistola, el imputado ha estado acompañado por su abogado defensor y también han estado presentes la acusación particular y el fiscal.


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