Agentes de la Guardia Civil, junto con las policías de Portugal, Francia y Bélgica, han desarticulado una red dedicada al contrabando de tabaco capaz de introducir en Europa millones de cajetillas de cigarrillos de forma ilegal, con las que obtenían unos beneficios mensuales de más de un millón de euros. En la operación han sido detenidas 13 personas -diez españoles, un inglés, un irlandés y un belga- y se han intervenido 2.668.250 cajetillas de tabaco, ha informado la Dirección General de la Guardia Civil en un comunicado. La organización operaba en Oriente Próximo, África y Europa, aunque estaba dirigida desde Marbella (Málaga), donde residían los dos cabecillas, de nacionalidad irlandesa e inglesa, mientras que los detenidos españoles se encargaban de introducir el tabaco procedente de los proveedores asiáticos y de almacenarlo en naves hasta su distribución por diferentes países. Para evitar la alerta por parte de las empresas tabaqueras, los detenidos comercializaban cigarrillos de firmas menos conocidas. La red usaba principalmente los puertos de Algeciras y Valencia, el de Amberes (Bélgica) y de Lisboa (Portugal), aunque si el tabaco viajaba por vía terrestre desde Oriente Próximo la organización empleaba Bulgaria. Con el fin de ocultar su actividad ilícita, habían creado un entramado empresarial compuesto por sociedades pantalla, con las que realizaban transacciones comerciales y declaraciones fiscales falsas. La operación se ha desarrollado en Sevilla, Algeciras, Valencia, Francia y Portugal. Además de los cerca de tres millones de cajetillas incautadas, los agente han intervenido 50.000 euros en efectivos y han bloqueado numerosas cuentas bancarias y propiedades inmobiliarias.