Según la alcaldesa, Susana Marqués, “la calle José Vallet presenta una singularidad única dentro del municipio por disponer de 66 ejemplares espectaculares de palmeras con más de 6 metros de altura y que conviene conservar. Sin embargo, debido al gran tamaño de las mismas los peatones no podían circular por las aceras y tenían que ocupar la calzada, con el riesgo para la seguridad vial que ello conllevaba”. Tras un estudio presentado por el área de Medio Ambiente y Movilidad, “se ha realizado la remodelación semi-peatonal de la calle separando la zona de vehículos de la zona de peatones, evitando aceras a distinto nivel, reduciendo la zona de paso de vehículos a un ancho mínimo y dotando a la zona de mobiliario urbano, compuesto por bancos y papeleras”, apunta el edil de Medio Ambiente, Clemente Martín. Con esta actuación también se han eliminado 8 palmeras de Canarias muertas debido al ataque del Picudo Rojo y se han substituido por ejemplares de Phoenix dactylifera (palmera datilera), especie más resistente a la plaga, “consiguiendo así un nivel paisajístico y ambiental integrado, con un diseño mediterráneo, una calle atractiva para pasear y sentarse en sus bancos”, ha continuado Martín. Marqués también ha informado de que “desde el consistorio se va a estudiar la posibilidad de realizar una actuación similar en la Calle El Faro y en la Calle El Cid, paralelas a José Vallet”.