Lo primero, ¿cómo está?: Ahora mucho más relajado. Las vacaciones que pensaba tomarme en Navidades de 2013, han tenido que llegar ahora, ¡qué le voy a hacer!. Sigo con mis clases, con los trabajos y un poquito de ocio también, ¿Está satisfecho por cómo ha terminado el proceso de venta?: Podíamos haber llegado a este acuerdo antes y a todos los que hemos formado parte de la Fundación, nos hubiera gustado otro tipo de acuerdo. Ha habido muchas piedras en el camino, empezando por la propia sentencia del aval que trastocó todos los planes de negociación que llevábamos hasta ese momento. ¡Qué le vamos a hacer, las cosas rara vez salen como uno tiene planificado! ¿Por qué tardó tanto en dimitir?: Porque tuvimos muchas presiones para que no dejásemos el proceso descabezado. Si yo me iba, se iban a marchar cuatro o cinco más y no se iba a poder negociar en una situación normalizada la venta del Valencia, pero ganas teníamos muy pocas de sufrir todo lo que hemos estado pasando durante estos meses. ¿Se ha sentido maltratado en este proceso?: Como todo en la vida, hay gente con la que me he llevado fantástico y otros, con diferentes intereses, no tanto.  A mí no me molesta la crítica. Ya he estado en otros sitios y es razonable que la gente tenga visiones distintas. Lo que molesta es que te ataquen, te insulten y además inventándose los hechos. ¿Cambiaría algo de este recorrido?: Pues quizá deberíamos haber hecho más rápido el proceso desde el inicio, cuando contábamos con todo el apoyo, pero la sentencia de la jueza anulando el aval lo trastocó absolutamente todo. Aquello era imprevisible. Si en ese momento, cogemos, nos sentamos, nos ponemos las pilas todas las partes y cerramos el acuerdo en un mes o mes y medio, ahora estaríamos en una situación distinta. Pero no fue así y tal vez fue culpa mía, o de todos: Al convertirte en presidente de la Fundación dijiste que el espejo en el que debería mirarse el Valencia era el Borussia Dortmund. Ahora después de la compra por parte de Lim, ¿en qué equipo habría que fijarse?. Habría que tender a un modelo inglés. Hay un propietario que va a arriesgar su dinero, que obviamente va a querer sacarle una rentabilidad y va a tener que capitalizar el club con fichajes para ponerlo en un nivel competitivo. No me cabe la menor duda que para rentabilizar el fútbol, hay que invertir más para poder jugar la Champions y disputar semifinales y finales. Pero, ¿quién ha ganado dinero en el fútbol?: Poca gente, pero en Inglaterra el modelo dominante es de globalización total. Las retransmisiones van para países asiáticos, también la venta de camisetas. En cualquier sitio al que vayas, verás la Premier, no la Liga española. Y ésa es la vía, internacionalizar el fútbol para sacarle rentabilidad al negocio. ¿Cómo ve la posición de Bankia ahora con cierta perspectiva?: Es verdad que Bankia ha recibido muchas bofetadas, pero también ha habido decisiones que tomó que chirriaban, por ejemplo con el comunicado de venta en plena Junta de accionistas, porque se la cargaron. O cuando se dijo que ellos no se identificaban con la decisión que tomara la Fundación sobre la mejor oferta de compra. Desde el derecho romano, el que tiene el bien es el que debe decidir a quién se lo vende. Pero estoy seguro que Bankia también tendrá una serie muy larga de quejas contra el proceso, y con su parte de razón ¿Por qué no acudió a la primera Asamblea informativa que Salvo convocó en Mestalla?: Se convocó de manera unilateral por el Valencia y la Fundación no intervenía para nada. Amadeo eligió unas formas que quizá no eran las correctas y no estaba de acuerdo, pero yo le he apoyado siempre y le he reconocido el mérito que ha tenido. De no haber sido por su tesón, capacidad de persuasión y constancia no se habría alcanzado el acuerdo ¿Cuál de las partes del proceso de venta ha salido vencedora?: El que más ha ganado ha sido Bankia que recupera prácticamente la totalidad de una activo que no estaba asentado, pero ha perdido en imagen. También ha ganado el Valencia, porque sin la venta habría estado condenado durante bastantes años a vender jugadores para poder ir paliando la deuda y eso nos llevaba a un Valencia en la parte media de la tabla. ¿Considera merecida la insignia de oro y brillantes recientemente concedida por el club?: Los méritos los valorarán otros. Yo me quedé verdaderamente sorprendido y sin saber qué decir cuando me la dieron, pero si la mayor parte de la afición valencianista cree que no la merezco, no tengo ningún problema en devolverla. ¿Le hubiera gustado seguir?, ¿se lo ofrecieron?: No, sinceramente no. Me insinuaron la posibilidad de continuar desde el principio, pero yo dije desde el primer día que me iría si se producía la venta y la única forma de callar todas las bocas era marcharme y que vengan otros.