El presidente de la patronal madrileña (CEIM), Arturo Fernández, ha anunciado que no piensa dimitir de sus cargos tras el tiempo de reflexión que ha tomado, a raíz de la investigación que abrió la Fiscalía sobre supuestos pagos irregulares a trabajadores en el grupo empresarial que dirige.Fernández ha avanzado, además, que ha puesto a disposición del presidente de la CEOE, Juan Rosell, su cargo de vicepresidente primero.Arturo Fernández ha informado de su decisión de no dimitir en la CEIM después de que el pasado 13 de febrero pidiera una periodo de reflexión y antes de avanzar que convocará a las juntas directivas de CEIM y de la Cámara de Comercio para que lo ratifiquen en el cargo. "No se puede estar en periodo de reflexión toda la vida", ha asegurado Fernández, quien considera que mantiene "todo el apoyo y afecto" de los empresarios madrileños.Sobre los supuestos pagos irregulares en su grupo empresarial, Fernández ha señalado que está pasando las inspecciones correspondientes del Ministerio y de la Dirección General de Trabajo. En este sentido, ha agregado que si existiese alguna "discrepancia" con sus actuaciones habría que "aclararlas y subsanarlas". Ha confesado Fernández que se siente "tranquilo" porque está "cumpliendo con sus obligaciones".Al respecto, ha apostillado que, si no es él, "cualquier otra persona" puede representar a la CEIM en el seno de la patronal española. Preguntado sobre si ha decidido presentarse de nuevo como candidato a presidente de la patronal madrileña, que celebrará elecciones tras el verano, Fernández ha admitido que no ha tomado ninguna decisión y que ésta dependerá de las circunstancias y de lo que la gente quiere que haga."No tengo ni idea, dependerá de las circunstancias y de lo que la gente quiera que yo haga", ha remarcado Fernández, máximo dirigente de la patronal madrileña desde el 2007.