Ahora traslada su experiencia en la montaña a un libro con el que pretende ayudar a todos los que quieren comenzar un proyecto, bien sea escalar una 8000, formar una familia o crear un negocio.  #COPEteayudamos

Araceli ha sabido encontrar la conexión perfecta entre montaña y vida real. “Todos somos personas y nos comportamos de la misma forma, independientemente del ámbito en el que nos movamos,  sea buscar trabajo, llevar una familia o crear una empresa”. “Uno de estos paralelismos es el miedo que tenemos a probar algo nuevo. Nos hacemos una montaña muy grande y creemos que todo es demasiado difícil porque nos venden las cosas muy exageradas”.

Esto no quiere decir que todo se pueda conseguir, aclara, “pero se puede dar un paso y estar mas cerca” del objetivo. “Pensamos las cosas y las vemos complicadas". "No las pienses, muévete", aconseja. "Un pequeño paso nos acaba llevando, la mayoría de las veces, sino es a conseguir el éxito total, a acercarte mucho”.

En su opinión, un proyecto se planea al igual que la escalada a una montaña. “La cumbre no es la mayor satisfacción, sino la planificación del proyecto”. “Cuando lo consigues, y llegas a ella, la mayoría de las veces es un punto vacío. El gozo ha estado durante todo el camino.  No te entretengas en al cumbre, haz el descenso con seguridad y cuando llegues al campo base, ahí está la explosión”.

Reconoce que por ser mujer no he encontrado “directamente barreras”. “No las busco y las evito”, explica en La Mañana donde ha presentado su libro “Ni tan alto, ni tan difícil” (ED La Galera).

Esta atleta, encontró su pasión por la montaña a los 15 años a través de la espeleología. “Me pasaba el día en el monte. No había forma de estudiar ni de hacer deberes. Siempre he pensado que seria excelente introducir un curso de viajes para niños en los colegios”.



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