La preocupación de los Obispos del sur de España ante la situación de la Enseñanza concertada en Andalucía, expresada ayer en un clarificador y rotundo comunicado, no es una cuestión menor, dado que afecta al ejercicio fundamental del derecho de los padres a elegir la educación de sus hijos según sus convicciones. Los obispos recuerdan que los centros concertados han prestado indiscutibles servicios a la educación en esa Comunidad Autónoma, de forma especial a la  formación de los sectores más desfavorecidos de la sociedad; y sin embargo se encuentran amenazados por los poderes públicos que responden con sus decisiones, no al interés general de sus ciudadanos, sino a planteamientos ideológicos. Esta amenaza a la enseñanza concertada se contradice, además, con la aceptación social de este modelo educativo, expresada en la creciente demanda de los padres para que sus hijos se eduquen en estos colegios. Los obispos del sur de España contemplan con preocupación que en estos momentos en los que se están renovando los conciertos, la Consejería de Educación del gobierno andaluz pretenda eliminar unidades escolares en centros que tienen demanda suficiente de alumnos desde hace años. Especialmente manifiestan su rechazo a que esta supresión afecte a los centros que trabajan con los niños más pobres y más necesitados de una educación integral.