El pleno ordinario eleva hoy al debate de la corporación la modificación de la ordenanza fiscal reguladora de la tasa por la prestación del servicio de enseñanzas especiales y por el servicio de actividades culturales del área de Cultura.   “Se trata de una medida que en la práctica va a suponer rebajas para algunos de los cursos que se convocan desde la concejalía”. Nuria Felip, regidora del departamento, ha explicado que hasta la fecha “cada ciclo establecía su coste de forma diferenciada”. Con la modificación “se establece una tarifa general por hora, que se limita a 1,5 euros, de modo que cada curso tendrá un coste en función del número total de horas de formación”. Así las cosas, “hay cursos que mantendrán sus tarifas y otros las rebajarán”.   El punto forma parte de un orden del día que contempla, asimismo, la proposición de la alcaldía por la cual se ratifica la modificación del contrato de préstamo suscrito con La Caixa. “Hemos rebajado el diferencial, quedando en el euríbor más 3,3 puntos porcentuales, lo cual conllevará un ahorro en los costes previstos para este préstamo”, ha señalado el regidor de Hacienda, Enrique Brisach.   Esta gestión, que generará ahorros para el consistorio, “se está trasladando a todas las entidades bancarias con las que el consistorio mantiene empréstitos”. Así las cosas, “estamos manteniendo conversaciones con el resto de entidades bancarias para renegociar la deuda y aplicar rebajas sobre los préstamos”, ha concretado el titular de la cartera de Hacienda.   Esta operación viene acompañada de una puesta al día en el pago con los proveedores, que en la actualidad se establece en 30 días para un consistorio cuya deuda que se sitúa en un 35%. Una situación financiera “muy buena que se ha conseguido después de superar los inconvenientes de una crisis económica que generó desequilibrios presupuestarios”.   En la actualidad, la deuda viva del consistorio se sitúa en 8 millones de euros después de haber cancelado varios préstamos con carácter anticipado, el último el correspondiente al ICO, de 2,1 millones de euros. “Nuestra deuda está dirigida a financiar las diferentes inversiones que hemos ido realizando a lo largo de estos años”. Por ello, “nuestra política ha sido y sigue siendo la de no endeudarnos más de lo que íbamos amortizando cada año”.