Así lo confirmó hoy la Oficina federal de Seguridad en las Tecnologías de la Información (BSI) en Bonn (oeste), que se pondrá en contacto con los perjudicados en colaboración con las compañías Deutsche Telekom, Freenet, gmx.de, Kabel Deutschland, Vodafone y web.de. El BSI ha decidido dar este paso después de que la fiscalía le informara del presunto robo de 21 millones de contraseñas de cuentas. Tras un análisis técnico, comprobó que son 18 millones las cuentas afectadas, entre las que se encuentran 3 millones de correos electrónicos alemanes. Éstos podrían haber sido obtenidos mediante la infección de los ordenadores con programas dañinos capaces de copiar la información privada del usuario para usos fraudulentos, advierte el BSI. La oficina federal anunció que pondrá a disposición de los internautas en la red una página web para comprobar la salud de cuentas de correo, como ya hizo en enero pasado cuando se anunció el hallazgo de 16 millones de identidades y datos de acceso a correos electrónicos robados. En ese proceso de revisión, el BSI detectó 1,6 millones de direcciones afectadas. Las autoridades germanas también aconsejaron a los afectados cambiar todas las contraseñas que tengan tanto en sus correos electrónicos como en sus perfiles en las redes sociales o en tiendas virtuales, para evitar que puedan ser usadas de modo fraudulento.