Este lunes Juan José Badiola ingresa en la Real Academia de Ciencias Veterinarias como catedrático de honor y lo va a hacer con un discurso sobre “Riesgos biológicos emergentes para la Sanidad Animal, Salud Pública y Seguridad de los alimentos”.

Porque al profesor Badiola le preocupa, ante todo, la salud. Su nombre  está unido al de la encefalopatía espongiforme bovina (EEB) o el mal de las vacas locas como se conoce popularmente. A finales del pasado siglo y principios de este, la sociedad estuvo muy alarmada por la aparición de diversos casos de encefalopatía espongiforme. El profesor Badiola estudió su introducción en la cadena alimentaria y sus efectos sobre los seres humanos.

La crisis, que afectó en especial a la cabaña vacuna británica, se trasladó posteriormente a otros países, entre ellos España donde aparecieron varios casos. La enfermeda de Creutzfeldt-Jakob no está erradicada, "sigo dedicándome a investigar enfermedades que me siguen preocupando" dice Juan José Badiola en 'La Tarde' y nos recuerda que "era una enfermedad muy complicada porque era una proteína sin ADN, entonces hay muchas preguntas que no están resueltas y no se ha sido capaz de encontrar tratamiento ni la forma de prevenirlo" y se lamenta "no hemos podido".

Pese a ello, nos parece una enfermedad del pasado, por ello el profesor Badiola nos destaca que nunca hay que dar por superada ninguna enfermedad, "hay riesgos a los que nos enfrentamos y no lo sabemos, hay nuevas enfermedades y otras que están reapareciendo como la tuberculosis que es el principal problema sanitario del mundo animal que preocupa a los británicos porque el patógeno se ha introducido en los tejones".

En España también está localizada en animales "aquí en los jabalíes y en los ciervos, quién iba a decir que se iba a introducir en la fauna silvestre, tenemos el zika, hay patógenos que están evolucionando constantemente por eso se llama de reemergencia".