En su primer discurso ante los medios de comunicación ha querido aprovechar para dar las gracias al resto de la Iglesia española y a su antecesor. "Agradezco a los obispos la confianza que han depositado en mí. Hay trabajos que se aceptan desde las convicciones más profundas de la vida, que para mí son la fe cristiana, el ministerio apostólico y el servicio a todos los hombres y mujeres de nuestra sociedad. Agradezco el servicio muy amplio que ha prestado el cardenal arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco Varela". En este punto ha recordado que comenzó su ministerio de su mano en Santiago de Compostela. "Él hizo ayer un recorrido del servicio inmenso que ha venido prestando la CEE. Quiero mostrarle mi gratitud en nombre de toda la Conferencia Episcopal". Sus primeras palabras han sido también para el Papa Francisco. "Muestro la comunión cordial, afectiva y efectiva con el Papa Francisco. La visita Ad Limina nos ha producido a todos una visión extraordinaria. Fue un encuentro inolvidable que se produjo por provincias eclesiásticas. Como hermano mayor con los hermanos menores. El Papa Francisco tiene la gracia de abatir las barreras invisibles que pueden crearse entre nosotros. Él enseguida muestra un rostro espontáneo, cercano y la reacción que suscita es semejante. Mañana se cumple un año de su elección. Tanto Benedicto XVI como el Papa Francisco nos ponen a todos al servicio de la comunidad cristiana y de los demás. El Papa Francisco ha manifestado desde el principio como el amor de Dios se tiene que manifestar con amabilidad". ¿Encuentra algunas diferencias respecto a su elección como presidente en 2005? "No tengo ningún programa y solo quiero combatir en tema de reflexión las prioridades evangelizadoras y apostólicas cercanas a los necesitados que propone el Papa. No tengo programa: entre todos lo diseñaremos y lo aplicaremos. Nuestra sociedad necesita que diariamente se nos anuncie el Evangelio. Necesitamos todos profundizar en las raíces de la esperanza porque hay motivos para ello. Hay motivos desde el mensaje cristiano y desde las cosas que van aconteciendo en nuestro entorno. Hemos sido creados a imagen y semejanza de Dios y estamos necesitados de Él. La Iglesia es una casa con puertas abiertas y, especialmente, si sentimos la indigencia".Confiesa que aún no le ha dicho a nadie de forma personal que ha sido elegido. "Nosotros debemos imitar a nuestro Señor y cada uno tiene su forma de ser, su personalidad". Y ha pedido la ayuda de los medios de comunicación. "Pedimos que seáis vías de comunicación".ASI HA SIDO SU ELECCIÓNBlázquez ha sido el más votado por encima del arzobispo de Valencia, Carlos Osoro, que ha obtenido diez votos, y del arzobispo de Sevilla, Juan José Asenjo, con cinco votos. El arzobispo castrense, Juan del Río, ha obtenido dos votos y el obispo de Calahorra y la Calzada (Logroño), Juan José Omella, un voto. Asimismo, ha habido un voto en blanco, y de los ochenta obispos con derecho a voto, sólo uno no lo ha ejercido.    Blázquez ha sido elegido presidente de la CEE durante la CIII asamblea plenaria de la CEE, en sustitución de Rouco Varela quien lo ostentaba desde 2008 hasta ahora y en el periodo 1999-2005.    Nacido hace 72 años en Villanueva del Campillo (Ávila), Blázquez actualmente es arzobispo de Valladolid y desde 2008, vicepresidente de la CEE. Fue obispo de Bilbao. Realizó sus estudios en los seminarios Menor y Mayor de Ávila (1955-1967) y fue ordenado presbítero en 1967. Obtuvo el doctorado en Teología por la Universidad Pontificia Gregoriana de Roma (1967-1972) y también estudió en universidades alemanas.    Entre los cargos pastorales que ha desempeñado destacan los de secretario del Instituto Teológico Abulense, profesor y decano de la Facultad de Teología de la Universidad Pontificia de Salamanca, así como vicerrector de la misma.    En 1988 fue nombrado obispo auxiliar de Santiago de Compostela, recibiendo la ordenación episcopal en esa catedral en mayo de ese año. En 1992 fue designado obispo de Palencia y tres años después de Bilbao. En marzo de 2010 el papa Benedicto XVI le nombró arzobispo de Valladolid."La Iglesia es una casa con puertas abiertas"