Cadamuro es un viejo conocido del fútbol español. Con padres italoargelinos y nacido en Francia, ya conoce lo que es jugar en Primera con la Real Sociedad y en Segunda con el Mallorca. No ha tenido fortuna en ambos destinos, pero su polivalencia hace de él una pieza útil para una defensa que está muy coja con la lesión de Oier y la actitud rebelde de Loties. Karim Ansarifard es el gran desconocido para la afición rojilla. Su condición de mundialista y sus buenas cifras como goleador en su país hacen albergar esperanzas ante su posible rendimiento, pero su capacidad en una liga como la española es toda una incógnita. Al menos, Urban podrá jugar con diferentes alternativas durante la campaña, pudiendo jugar con dos puntas tan diferentes como el iraní y Nino.