La genealogista Mireia Nieto ha rastreado su ascendencia hasta el año 1600. Lleva seis años completando su árbol genealógico.

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“Es una curiosidad muy sana. Es bueno preguntarse de dónde venimos y quiénes somos. En mi caso, descubrí que venían de diferentes puntos de España. Soy hija nieta y bisnieta de la emigración”, ha dicho.

Para la genealogista, “cuando me viene algún cliente, le pregunto qué sabe de su familia y quiénes son sus padres. A partir de ahí empiezo a investigar. A veces la no información te da la información.

En el País Vasco es más fácil manejar datos, porque “los registros parroquiales vascos están digitalizados desde el 1900”.

“Si no estás preparando para encontrar sorpresas, pues no te metas. A veces impactamucho. Me he llegado a encontrar bisiabuelos asesinados, o una vez, una persona que fue atravesada por un rayo en una noche de tormentas y salió ilesa”, ha comentado en 'La Tarde'.