El director general del Málaga explica cómo se siente el club después de que el TAS echara atrás su recurso: "Nos sentimos frustrados, aunque sabíamos que era complicado. Al salir del TAS sí quedamos satisfechos de poder demostrar lo que quisimos demostrar. Con la UEFA no se puede discutir, los 300.000 € de multa nos los descuentan como parte de la primera sanción. Somos la cabeza de turco, es una decisión política, necesitaban a un equipo español. Estamos trabajando con el fair play financiero a rajatabla."