Así cazó el CNI a Puigdemont

La inteligencia española siguió todos los pasos del expresident desde su llegada a Helsinki. Dejaron que pisara suelo alemán para favorecer su detención 

COPE

Tiempo de lectura: 2' Actualizado 27 ago 2018

La Policía Nacional, la Oficina Federal de Investigación Criminal de Alemania y el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) coordinaron la detención este domingo en Alemania del expresidente de la Generalitat de Cataluña Carles Puigdemont. El arresto del expresidente de la Generalitat se produjo  a las 11.19 hora local, en una autopista del país, al que entró a través de la frontera con Dinamarca, tras abandonar el viernes por la noche Finlandia, donde había sido invitado para ofrecer unas conferencias.

El pasado viernes el juez del Supremo reactivó la orden europea de detención y entrega (OEDE) contra Puigdemont, cuatro exconsellers y la secretaria general de ERC, Marta Rovira, todos ellos huidos de la Justicia y procesados por el delito de rebelión y malversación, si bien este último no se aplica a la dirigente de Esquerra Republicana. Fue el inicio de una caza donde el entorno de Puigdemont intentó desorientar a la inteligencia española... de forma infructuosa. 

Puigdemont tuvo siempre a agentes de la Policía Nacional cerca de él desde que llegara a Finlandia el pasado jueves. La inteligencia española sospechaba que Puigdemont rehusaría usar la vía áerea para volver a Bruselas ya que podría poner en peligro su libertad. Efectivamente: su plaza en el vuelo del sábado a Bruselas a media tarde quedó vacía, puesto que la noche anterior Puigdemont ya había abandonado Helsinki acompañado de otras cuatro personas en un coche habitual en su entorno, de matrícula conocida por la Policía. El diputado finlandés Mikko Kärnä, uno de los anfitriones del expresidente de la Generalitat catalana, confirmó ese sábado que el político había abandonado el viernes noche el país nórdico en dirección a Bélgica.

Todo regreso a Waterloo pasaba por Alemania. La Policía lo sabía y dejaron que el expresidente siguiera su camino hasta allí. Presumiblemente, viajó en barco hasta Estocolmo y de ahí en su coche, que estaba balizado, hasta Malmö y a través de Suecia y sus puentes, a Dinamarca. Una vez recorrió 30 kilómetros en Alemania, el CNI dio aviso a las autoridades alemanas, que efectuaron su detención, en un punto kilométrico de la autopista A7 cercano a la localidad de Schuby, a apenas 750 kilómetros de Waterloo. 

El coche de Puigdemont pudo ser interceptado gracias al sistema de videovigilancia que analiza las matrículas de vehículos, tanto en Alemania como en España. Cuando una matrícula sospechosa es captada, el sistema lanza la alerta y la Policía puede detener a la persoan buscada. La fuga de Carles Puigdemont terminó en su día 146.